Rita Giacalone
Mayo 2023
Investigar es siempre una experiencia estimulante ya sea que se trate de un requisito para aprobar un curso, culminar una carrera de pre o postgrado, proponer un proyecto, presentar un informe parcial o final de lo que estamos realizando o exponer a discusión sus resultados con una ponencia en un congreso o un artículo en una revista.
Ese proceso puede navegarse con más facilidad si se recibe ayuda cuando se la
necesita. La ayuda puede ser puntual – alguien que traduzca o resuma un texto
clave para el tema, que no se puede hacer por falta de tiempo o porque no se
está seguro acerca de la habilidad en el manejo de ese idioma; alguien que
revise lo que hemos escrito para asegurarnos de que nuestras ideas están
expuestas de forma clara y completa; alguien que nos diga si la investigación
realizada o propuesta alcanza el nivel de calidad esperado y, si no es así, lo
acompañe de ideas acerca de cómo mejorarlo; alguien que nos facilite la búsqueda de información
empírica o teórica para completar nuestra comprensión del tema; en otras palabras,
alguien que nos asesore.
La ayuda puede ser también más completa incluyendo cualquier
combinación de las actividades puntuales señaladas, u otras que el investigador
demande según su etapa de formación y los requisitos a cumplir.
Después de una larga carrera profesional, como
investigadores responsables de numerosos proyectos y publicaciones y como
coordinadores de grupos de trabajo donde nos concentramos en mejorar la calidad
de la labor de nuestros estudiantes y asociados, nos proponemos ahora canalizar
esa experiencia en su beneficio.
Si todos podemos aprovechar un buen consejo dado en el momento preciso en que lo necesitamos y de la forma más clara posible, nuestra asesoría puede ayudarle a hacer su investigación de forma más rápida y segura.
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